Son 3 los componentes esenciales en un flujo de trabajo de Streaming
- Contenido
- Codificación y captura
- Preparación y Distribución
- Reproducción
Contenido: Este es el componente menos tecnológico del asunto pero tal vez el más importante. Se trata del tema, el lenguaje, las imágenes, los presentadores, textos, vídeos, diapositivas, invitados, etc. En términos de la comunicación convencional es “El mensaje” que quieres enviar hacia tu público. Si el contenido no es acertado, no tiene un objetivo claro o su comunicación es deficiente, se pierde todo el hilo conductor y el fin mismo de hacer streaming ya no tiene sentido.
Este componente está 100% en manos del organizador o dueño del contenido.
Codificación y captura: Aquí encontramos generalmente los componentes de hardware y audiovisuales, es decir cámaras, micrófonos, tarjetas de captura. cableado, computadores etc. También está el software que se encarga de codificar (hacer más pequeña y liviana) la señal de vídeo o de audio y producirla para que se vea estéticamente agradable y muy profesional. Wirecast, OBS, vMix son solo algunos de los que encuentras en el mercado y de los cuales hablaremos con más detalle en otros artículos.
Este componente generalmente es delegado en un productor audiovisual o empresa de eventos. En algunos casos es el propio organizador quien a través de elementos sencillos como cámaras web y micrófonos USB se hace cargo de ello.
Preparación y Distribución: Este componente es el más complejo y generalmente está en manos de un proveedor tecnológico externo. Aquí encontramos los servidores, protocolos, CDN, nubes, cifrado, seguridad y todos esos temas de tecnología. Encontramos servicios como Facebook Live o Youtube Live entre otros tantos de los que ya hemos hablado. Son ellos quienes reciben la señal desde el codificador del usuario a través de protocolos (lenguaje común entre tecnologías) y preparan todo para transmitir esa señal hasta los cientos o miles de dispositivos de los usuarios.
Al ser el componente más complejo de administrar, está en manos de grandes empresas o proveedores especializados en streaming, que garantizarán que la señal de vídeo pueda ser reproducida por cualquier dispositivo, en cualquier parte del mundo con el más alto grado de calidad y rendimiento.
Reproducción: Es el último elemento de la cadena y destino final del streaming. Aquí encontramos los dispositivos del usuario (Smartphone, TV, Tablets, computadores, consolas de videojuegos, etc…) que sirve para reproducir y visualizar el contenido de vídeo o audio del organizador en tiempo real. El único requisito: Contar con una conexión de internet de buena calidad.
Sin importar en qué proveedores o plataforma de streaming pienses, por debajo siempre estarán estos 4 componentes esenciales. Netflix, Spotify, Youtube, Facebook, todos estos por debajo tienen este mismo flujo.